Los proyectos de viviendas pensados para proporcionar bienestar y salud a sus propietarios son el nuevo objetivo del sector inmobiliario mundial.
La arquitectura tiene el objetivo de provocar sensaciones, sean positivas o negativas. Y la neuroarquitectura es la ciencia encargada de explicar cómo el espacio afecta a la mente.
Esta disciplina, creada en 1998 por los neurocientíficos, Fred H. Gage y Peter Eriksson, explica que la forma en la que se diseña y construye los proyectos inmobiliarios, puede ayudar al bienestar mental y la felicidad de las personas. Y puede estimular la creatividad, mantener la atención y la concentración, aumentar la productividad y favorecer la relajación.
En el diseño de oficinas estos parámetros ya se tienen en cuenta. Hay numerosos estudios que demuestran que la iluminación natural y las vistas mejoran la productividad, el rendimiento y la memoria. Los techos altos propician la creatividad, mientras que los bajos favorecen la concentración.
Detrás del diseño de este nuevo concepto de arquitectura hay un equipo multidisciplinar de colaboradores entre arquitectos, ingenieros, médicos, científicos, sociólogos y neurólogos. El objetivo, plantear un proyecto en el que se tenga en cuenta la felicidad de las personas.
Un punto de partida son las blue zones (zonas azules), los cinco lugares del mundo donde la gente vive más y es más feliz. En Okinawa (Japón), Icaria (Grecia), Cerdeña (Italia), Loma Linda (California) o la península de Nicoya (Costa Rica) es habitual que todos los habitantes cumplan 100 años. Lo que se trata es de replicar las condiciones que se dan en esos lugares donde la esperanza de vida es 20 años superior a la media. Un estudio de la Universidad de Harvard, sugiere que la gente vive más y envejece mejor donde se fomentan las relaciones sociales y se fortalece esos contactos. La idea es conducir a encuentros casuales, no forzados, creando espacios comunes para los vecinos como zonas de socialización, huertos urbanos, granja escuela para niños, un viñedo, etc.
Además de los espacios comunes, esta nueva arquitectura fomentará la actividad física con el diseño de escaleras atractivas que animen a la gente a usarlas, se preocupará por la calidad del aire, del agua y la luz. Evitará los grandes espacios abiertos, grises y vacíos entre edificios porque generan sensación de soledad y aislamiento. Y se optará por contornos redondeados y esquinas curvas porque ayudan al relax mental.
En Constructora Barrazueta nos preocupamos por desarrollar proyectos inmobiliarios bajo las normativas vigentes de diseño y construcción. Cumpliendo con nuestro objetivo de crear una relación ideal entre el cliente, producto y calidad. Además, nos preocupamos por el bienestar de la comunidad que se crea en cada conjunto residencial que construimos, a través de campañas, consejos y recomendaciones para una buena convivencia.
Fuente: elpais.com