¿Estás planeando rentar un lugar para vivir, pero al mismo tiempo piensas que ese dinero podrías invertirlo en tu casa propia?
Sin duda, no hay mayor satisfacción que llegar a casa después de una larga jornada de trabajo o de actividades para compartir de una cena con tu pareja o familia, o para mirar una película, descansar, desconectar del mundo o para ver el capítulo que tanto esperabas de tu serie favorita. ¡Al final del día, solo quieres llegar a tu lugar seguro!
Pero al momento de tomar la decisión de si ese lugar seguro será propio o alquilado, surgen varias interrogantes que van más allá del presupuesto con el que cuentas, sino también, con lo que se adapta a tu estilo de vida, a tus necesidades y los planes que tienes a futuro.
Una de las etapas más importantes y emocionantes de la vida es poder independizarte de tu casa y tomar las riendas de tu camino por tu cuenta. Sin duda, debe pasar un tiempo para poder lograrlo, ya que se debe estar completamente seguro para dar el salto, algunos optan por rentar un departamento y otros comprar directamente una vivienda. Depende, en gran medida, de lo que deseas en ese momento, de las posibilidades que puedes conseguir en el camino, pero sin duda la preferencia está en tener una casa propia, pues esta será una de la inversiones más importante de tu vida.
Pero ¿qué ventajas y desventajas tiene el rentar o adquirir una casa propia?
Rentar o comprar una vivienda, es una decisión personal. Una vez que has tomado la decisión de mudarte, debes fijarte en los pro y contras de ambas opciones.
Acá te dejamos algunas ventajas y desventajas que te pueden guiar a tomar la mejor decisión.
Ventajas de arrendar
Tienes opciones de departamentos y precios de arriendos, depende del sector en el que deseas rentar, los precios varían, adaptándose a tu presupuesto.
Si no te gusta del todo el lugar, puedes buscar otras opciones en otro espacio y que se ajuste al dinero que tienes.
No tienes que gastar en reparaciones como arreglos en sistema eléctrico, remodelaciones de espacios, mantenimientos de cisternas, entre otros. Eso lo hace el dueño de casa.
Para estudiantes universitarios, solteros y parejas que no cuentan con el dinero para comprar muebles, camas, línea blanca, rentar una vivienda amoblada, resulta un alivio económico.
Al rentar un departamento o casa no necesitas tener una excelente calificación en tu récord crediticio, pero puede ser el mejor momento para mantener tu récord en excelente estado para cuando desees comprar tu vivienda no tengas ningún inconveniente para adquirir un préstamo hipotecario.
Desventajas de arrendar
El dinero del pago de tus rentas no regresa. Es decir, no hay inversión.
El dueño puede pedirte que te mudes en cualquier momento.
Cada cierto tiempo la cuota del arriendo aumenta, lo que puede perjudicar tus finanzas.
No puedes realizar modificaciones de la casa o del departamento a tu gusto y a tus necesidades.
Algunos propietarios no permiten mascotas en sus viviendas.
Ventajas de invertir en tu casa propia
Es tu patrimonio, algo tuyo, una inversión para toda la vida, que podrás disfrutar con tu familia y puede ser una herencia a futuro para tus hijos.
Tener un hogar propio te brinda la sensación de estabilidad.
Tienes libertad para hacer adecuaciones y decoraciones a tu gusto y a tus necesidades.
Puedes comprarla para uso personal o inversión generando ingresos extras que te ayudarían a pagar una parte de la cuota del préstamo hipotecario.
Puedes venderla a un mejor precio de lo que compraste, dependiendo el sector en el que vives. Además, puede servir como hipoteca para adquirir un crédito educativo.
Desventajas de comprar
El cambio en la economía, puede reducir el valor de tu casa.
Con una casa propia, vienen gastos adicionales en mantenimiento e impuestos.
Cuando tienes planes de establecerte en otra ciudad o país por trabajo, estudios o para vivir de forma permanente.
Una vez que tengas claro dónde te gustaría vivir, has empezado a ahorrar, cuentas con una planificación a futuro y estás al día en tu récord crediticio, estarás listos para invertir en la casa de tus sueños. Tu patrimonio que será el hogar que te cobijará en cada momento de tu vida. Porque invertir en una casa propia es invertir en espacio seguro donde podrás compartir con tus seres queridos y podrás ambientarlo a tu gusto y a tu manera, convirtiéndolo en tu vivienda ideal.
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